La Diócesis de Madrid y en particular la Congregación religiosa, Oblatos de María Inmaculada, están de enhorabuena.
La Congregación sufrió en su Casa de Pozuelo de Alarcón el martirio de todos sus componentes durante la persecución religiosa padecida en España en el siglo XX, concretamente en el mes de julio de 1936.
Ahora el 17 de diciembre próximo, en la Catedral de la Almudena de Madrid y con el ceremonial y la liturgia adecuadas los 23 miembros mártires, 22 religiosos y un seglar, serán beatificados alcanzando así el reconocimiento público de la Iglesia Católica al testimonio dado con su martirio.
La noticia de ese reconocimiento nos alegra de modo sumo a cuantos confiadamente esperamos que la glorificación alcance a los sacerdotes, religiosos y seglares que fueron víctimas de la misma persecución de hace 75 años en la Diócesis de Ciudad Real.
De la lectura de las páginas 207 a 209 del libro “Mártires de Ciudad Real”,( Francisco del Campo Real, Editorial Edibesa 2007), se deduce que el número de mártires documentados que dieron testimonio de su fe en la Diócesis de Ciudad Real, fueron en total 205, 89 religiosos, 89 sacerdotes diocesanos y 27 seglares. De ellos ya beatificados en diferentes ocasiones lo han sido 37 religiosos, un seglar y 5 sacerdotes, entre ellos el Obispo que lo era de la Diócesis, D. Narciso de Estenaga. En la fase Romana de la Causa se encuentran 52 religiosos y desde el año 2001 se trabaja a nivel Diócesis en la causa del resto: 82 sacerdotes, dos seminaristas y 26 seglares. Así pues la Diócesis espera la beatificación de 162 mártires.
Para los Oblatos de María Inmaculada mártires en Pozuelo de Alarcón ha llegado su glorificación.
¡Qué ellos intercedan para que también alcancen pronto su beatificación los mártires de Ciudad Real: 52 religiosos en fase Romana y para que se culminen cuanto antes los trabajos de identificación y estudio previo diocesano de los restantes 110 mártires, entre los cuales hay 26 seglares!