domingo, 29 de mayo de 2011

LA BIBLIA en CADA MOMENTO ( III )






Cuando te sientas pecador: para acercarte a Dios
Salmo 51 (50) El “miserere” de David



1Salmo de David. 2Cuando el profeta Natán vino a él después de su pecado con Betsabé.

3Ten compasión de mí, oh Dios, por tu misericordia, por tu inmensa ternura borra mi iniquidad.
4Lávame más y más de mi delito y purifícame de mi pecado.
5Reconozco mi iniquidad, tengo siempre delante mi pecado.
6Contra ti, contra ti solo pequé y he hecho lo que tú no puedes ver.
Por eso tu sentencia es justa y eres recto en el juicio.
7Ya nací en la culpa, y en el pecado me concibió mi madre.
8Tú quieres la verdad en el centro del alma y en el centro del corazón me enseñas la sabiduría. 9Purifícame con el hisopo, y quedaré puro; lávame, y quedaré más blanco que la nieve.
10Hazme sentir gozo y alegría, y que dancen los huesos que rompiste.
11Aparta tu rostro de mis faltas, cancela mis pecados.
12Oh Dios, crea en mí un corazón puro, implanta en mis entrañas un espíritu nuevo;
13no me rechaces lejos de tu rostro, no retires de mí tu santo espíritu;
14dame la alegría de tu salvación y que el espíritu generoso me mantenga firme.
15Enseñaré tus caminos a los descarriados, los pecadores volverán a ti.
16Líbrame de delitos de sangre, Señor, salvador mío, y mi lengua exaltará tu justicia.
17Señor, abre mis labios, y mi boca anunciará tu alabanza.
18Tú no quieres ofrendas ni holocaustos; si te los ofreciera, no los aceptarías.
19El sacrificio que Dios quiere es un espíritu contrito,
un corazón contrito y humillado, tú, oh Dios, no lo desprecias.
20Sé propicio a Sión en tu benevolencia, reconstruye las murallas de Jerusalén.
21Entonces aceptarás los sacrificios justos —holocaustos y ofrendas perfectas—,
entonces se ofrecerán novillos en tu altar.

lunes, 23 de mayo de 2011

LA BIBLIA en CADA MOMENTO ( II )

Junto a Dios no hay temor a las críticas y “persecuciones”

SALMO 27 (26) De David.

1El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién podré temer?
El Señor es la fortaleza de mi vida, ¿ante quién puedo temblar?
2Cuando me asaltan los criminales para destrozarme, son ellos, mis opresores y enemigos,
los que tropiezan y sucumben.
3Aunque un ejército acampe contra mí, mi corazón no teme;
aunque una guerra estalle contra mí, estoy tranquilo.
4Una cosa pido al Señor, sólo eso busco: habitar en la casa del Señor todos los días de mi vida
para gustar la dulzura del Señor y contemplar la belleza de su templo.
5Él me dará cobijo el día de la desgracia, me esconderá en lo oculto de su tienda, me subirá a lo alto de la roca;
6así mi cabeza dominará a los enemigos que me cercan, en su tienda podré ofrecer sacrificios entre aclamaciones, cantando y ensalzando al Señor.
7Escucha, Señor, mi grito suplicante, ten compasión de mí, respóndeme.
8De ti mi corazón me ha dicho: "Busca su rostro"; es tu rostro, Señor, lo que yo busco;
9no me ocultes tu rostro, no rechaces con cólera a tu siervo;
tú eres mi auxilio, no me abandones, no me dejes, oh Dios, salvador mío.
10Mi padre y mi madre me han abandonado, y el Señor me ha recogido.
11Enséñame, Señor, tus sendas y guíame por el camino recto, pues me están acechando;
12no me entregues al capricho de mis perseguidores,
pues se han alzado contra mí testigos falsos que respiran violencia.
13Yo estoy seguro que he de ver los bienes del Señor en el mundo de los vivos.
14Espera en el Señor, ten ánimo, sé fuerte, espera en el Señor.

sábado, 14 de mayo de 2011









LA BIBLIA en CADA MOMENTO (I)

Un amigo, que es un experto en la lectura y la meditación de la BIBLIA me ha regalado unas páginas con el título que antecede este comentario, y que contienen textos del libro sagrado aplicables a cada estado de ánimo, o cuando se siente alguna a necesidad o inquietud.


He aquí, para Buscar al Soberano Padre Celestial, lo que escribió el Profeta Isaias (55:6-10):

55.6. Buscad al Señor mientras pueda ser hallado; clamad a Él mientras está cerca.

7 Deje el malvado su camino y el malhechor sus pensamientos; conviértase al Señor, que tendrá piedad de él; a nuestro Dios que es generoso en el perdón.

8 Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos-dice el Señor-.

9 Como se alza el cielo por encima de la tierra se elevan mis caminos sobre vuestros caminos y mis pensamientos sobre vuestros pensamientos.

10 Como la lluvia y la nieve descienden del cielo y no vuelven allá sin empapar la tierra, sin fecundarla y hacerla germinar para que dé sementera al sembrador y pan para comer, 11 así la palabra que sale de mi boca no vuelve a mi sin resultado, sin haber hecho lo que yo quería y haber llevado a cabo su misión.
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sábado, 7 de mayo de 2011

MAYO, mes de MARIA



No tengo ninguna referencia para poder saber si ahora el mes de MAYO y su dedicación a la Santísima Virgen María tiene en los Colegios, en las catequesis y en los cultos de las Iglesias, la resonancia y el fervor entusiasta que tuvo en tiempos atrás.
Claro que mis recuerdos se sitúan en el Colegio de una Congregación que hace gala del culto a la Virgen bajo una advocación que anuncia misericordia y salvación: María Auxiliadora de los Cristianos. Para los de casa, los Salesianos, simplemente María Auxiliadora…
Mes de Mayo, mes de las flores, todos los días con un pequeño homenaje a la Virgen, una jaculatoria, un recuerdo especial, una promesa, además de los cultos colectivos de todo el Colegio, y de las asociaciones de Antiguos Alumnos y del Círculo de Santo Domingo Savio. (Éste, entonces solo Venerable). Y a medida que avanzaba el mes se intensificaban las devociones la particular y la de toda la comunidad, que culminaban con la novena preparatoria, la vigilia y el día grande, el 24, festividad de la Virgen bajo aquella advocación. Y el momento cumbre de ese día, después de los cultos en la Iglesia, consistía en sacar a la Virgen en procesión multitudinaria por las calles de la barriada.
Con independencia de que el mes de mayo tenga o no el sentido mariano de entonces, lo que es evidente que España tiene tal riqueza de advocaciones y títulos de la Virgen, todas ellas con sus festividades señaladas en el calendario, que podría convertir no solo el mes de mayo, sino todo el año en un homenaje permanente a la Auxiliadora, la Mediadora, a la Esperanza nuestra.
¡Qué suerte tenemos los españoles que con la sola mención de cualquiera de sus títulos homenajeamos a la Santísima Madre de Dios!